«Desde la inmortal Alicia, Ana, la de Tejas Verdes, es la niña imaginaria más encantadora que se haya creado.» Mark Twain. Cuando en lugar del chico huérfano que querían adoptar es una niña pelirroja de once años, Ana Shirley, la que entra en las vidas de Marilla y Matthew Cuthbert ùdos hermanos solteros que residen en su casa de Tejas Verdesù, todo cuanto les rodea cambiará para siempre. Con su vivacidad, sus risas y también sus lágrimas, y sobre todo gracias a su desbordante alegría e imaginación, Ana conseguirá formar parte de una familia por primera vez y tener un lugar al que, al fin, podrá llamar hogar. Ambientada a principios del siglo XX en un lugar tan mágico como la Isla del Príncipe Eduardo, en Canadá, Ana, la de Tejas Verdes nos llevará a través de los ojos de esta despierta e inocente niña a sentir el mundo como algo totalmente nuevo, a emocionarnos y reírnos con sus aventuras y peripecias, y, en definitiva, a ver la vida desde un prisma más positivo y estimulante. Esta obra, al igual que toda la serie de Ana Shirley, conjuga los valores de la vida rural y la familia con las cuesti