UNA MIRADA REFLEXIVA Y RELAJADA SOBRE LA INFANCIA Y LA PATERNIDAD Si examinamos con atención la vida diaria de muchos niños, nos podemos llevar una desagradable sorpresa: presiones para ser los mejores, sobrecarga de actividades extraescolares, competitividad constante... A lo mejor, esa no es la vida que necesitan ni quieren tener una agenda tan apretada como la de un adulto. Este libro está lejos de ser una guía para ser los mejores padres. Al contrario, propone un cambio de perspectiva sobre la educación de los niños para calmar el nerviosismo que les rodea y que puedan disfrutar de una infancia digna de ser llamada así.