Eva y Gideon se han casado por fin, pero lejos de aportarles placidez y seguridad, el matrimonio abre en Gideon viejas heridas y los fantasmas de su pasado amenazan la felicidad de ambos.
«En el momento más luminoso de nuestras vidas, la oscuridad de su pasado nos invade y amenaza todo lo que hemos conseguido. Debemos elegir entre la comodidad de las vidas que teníamos antes de conocernos o la lucha por un futuro que de repente parece un sueño imposible y sin esperanza.»