Igual que la peste en tiempos de Boccaccio, las modernas pandemias repercuten en nuestra vida familiar, social y moral. Boccaccio, siguiendo los consejos de un sensato médico de la época, orienta el viaje de este grupo de jóvenes hacia la campiña toscana, lejos de las grandes masas de gente, donde puedan disfrutar de la naturaleza, huir de la tristeza y vivir en comunidad de forma organizada. Recuperar la dimensión social de nuestra vida humana frente a la enfermedad y el miedo al contagio.