Quien sabe leer puede aprender a vivir bien utilizando los mismos recursos que usó para descifrar las claves del lenguaje. La intención es que el estado de ánimo de los lectores de estas páginas mejore de manera considerable tras su lectura, como un pequeño cambio en el ritmo biológico del cuerpo que inunda de placer el cerebro y le hace sentir que el mundo merece la pena gracias a las palabras, dice la autora de este libro. El arte de amar la vida explica cómo forjar una conciencia preciosa y sabia, una sensibilidad divertida, elegante y original que nos ayude a vivir mejor, enriqueciendo nuestro carácter. Con expresiones siempre escogidas con cuidado, la autora transforma su peculiar arte poética en todo un arte de vivir y educar el espíritu. Pero El arte de amar la vida no promete la felicidad ni impone la obligación de ser feliz, sino que enseña cómo ser un poeta o artista existencial cuya mejor obra sea la propia vida. Vallvey explora la vía que ya transitó en forma de narrativa con Los estados carenciales, ganadora del Premio Nadal en 2002 y que supuso un auténtico éxito editorial traducido a veinte idiomas.