Estela es una niña a la que le gustan muchas cosas. Cuando se baña, le gusta jugar en el agua e imaginarse que es un delfín; le fascina jugar con sus amigos en la escuela y también le encanta imaginar que su pelo, oscuro y larguísimo, es un vestido mágico que la protege del mundo y la hace invencible.
Hasta hace poco le gustaba jugar con su tío Anselmo, pero últimamente la lleva a la habitación y le hace cosas que a ella no le gustan nada.
Conchita, su maestra, le recomendó a Estela un truco maravilloso; un truco que funciona cuando pasa algo que no le gusta o alguien quiere hacerle daño: ¡grita muy fuerte!