En la tradición de los grandes autores de fábulas, Tolstoi escribió estos textos con afán de enseñar de manera amena, a niños y mayores, con humor y con sabiduría, ejemplos de la vanidad y la estupidez humana, y por contraste, de algunas cualidades que conviene cultivar. Bonitas historias, que dan mucho que pensar y nos muestran el valor la inteligencia, la sencillez, la sensatez, la compasión...a menudo con animales como protagonistas. Las ilustraciones de Carla Olivé iluminan todas las fábulas.
En la tradición de los grandes autores de fábulas, Tolstoi escribió estos textos con afán de enseñar de manera amena, a niños y mayores, con humor y con sabiduría, ejemplos de la vanidad y la estupidez humana, y por contraste, de algunas cualidades que conviene cultivar. Bonitas historias, que dan mucho que pensar y nos muestran el valor la inteligencia, la sencillez, la sensatez, la compasión a menudo con animales como protagonistas. Las ilustraciones de Carla Olivé iluminan todas las fábulas.