La momia misteriosa recopila numerosas historias cortas de Jason aparecidas en distintos medios, en las que el autor noruego hace gala de un humor absurdo absolutamente personal. Fatalista pero rebosante de ironía, Jason sabe divertir al lector encadenando situaciones que rápidamente se vuelven coherentes. Maestro del minimalismo y admirador de Hergé, Jason homenajea al autor de Tintín con guiños a Los cigarros del faraón o incluso a La oreja rota, sus policías nos recuerdan a Hernández y Fernández, pero el propósito es ácido y los personajes tan perturbados como si estuvieran en una película de Tarantino.