"Su abuelo le enseñó el oficio de leñador, los nombres de las plantas y de los animales, y cómo servirse de cuanto el bosque les daba. Esteban heredó su carácter apacible y, a pesar de que la vida no le había resultado nada fácil, jamás pudo escucharse queja alguna salida de sus labios. Se conformaba con lo que tenía y habitaba en el bosque como lo habría hecho en un inmenso jardín que él fuera el encargado de vigilar y atender" La maestría literaria, la elegancia y el magnetismo narrativo definen la extensa obra de Gustavo Martín Garzo. Actualizada con las ilustraciones de MO Gutiérrez Serna -de líneas etéreas que contrastan con manchas figurativas de intenso colorido-, La princesa manca es una historia que rebosa magia y fantasía, construida con hermosos relatos que se entremezclan; un elaborado puzle estructural que conduce a una lectura seductora, que atrapa e intriga desde la primera página: Hace muchos años