Tras partir hacia Oriente con el pequeño Michael, tía Mame (que nos sorprendió y fascinó con La tía Mame, Acantilado, 2010) había prometido regresar a tiempo para la vuelta al colegio del niño. Pero ya han pasado dos años y medio, y nada se sabe de la extraña pareja, más allá de algunas postales fortuitas llegadas desde lugares exóticos. Pegeen está fuera de sí, pero Patrick intenta calmarla: tía Mame es la mejor compañera para dar la vuelta al mundo, su único problema es no ver nunca el momento de regresar... Así que Patrick decide explicar a su mujer, con bastantes omisiones, un parte de su vida que había mantenido oculta hasta entonces: unos años antes de la Segunda Guerra Mundial, él dio la vuelta al mundo con tía Mame: París, Londres, la Austria nazi, la Rusia soviética y Oriente son algunos de los destinos de ese divertidísimo viaje, lleno de aventuras, en el que el lector no parará de reír con la extravagante y deliciosa Mame, con su sentido del humor irreverente y sus ganas de vivir.