Toño Azpilcueta pasa sus días entre su trabajo en un colegio, su familia y su gran pasión, la música criolla, sobre la que lleva investigando desde su juventud. Un día, una llamada le cambia la vida. Y la invitación a escuchar a un guitarrista desconocido, Lalo Molfino, un talentoso personaje que ha muerto en el anonimato, parece confirmar sus intuiciones sobre la importancia de los músicos populares. Mientras sigue la pista de Molfino, Azpilicueta sueña con un país unido por la música y decide escribir un libro perfecto que lo retrate. la ficción y el ensayo se entremezclan de forma magistral en esta novela en al que el premio Nobel vuelve sobre una de sus obsesiones: las utopías.