Recompuestas ya sus carnes, tras haber resucitado y dejado la tumba atrás, León de Bretaña aguarda a ser coronado como primer monarca de un imperio que existe sin necesidad de fronteras, porque nace, ajeno a los mapas, de la memoria y de la fabulación. Mientras la hora de la ceremonia se acerca, el emperador, que no distingue entre sus propios recuerdos y los recuerdos ajenos, se reencuentra, en este libro que sirve de escenario al mayor de los milagros -la vuelta a la vida de los muertos con las voces de quienes custodian la historia y los secretos de un universo atlántico. En este mítico universo Galicia se hermana, a través del mar, con la Irlanda de San Patricio, con la Armórica en la que aún fue joven Merlín y con todas las islas errantes que un día habitaron los que, cuando Roma ni siquiera era un sueño, leían el futuro en las estrellas.