Aquel Día de Reyes nadie recibió regalos. Ni niños, ni adultos. Quizá os preguntéis: «¿Y carbón?». Tampoco: nadie recibió carbón. Ni grandes ni pequeños. Melchor, Gaspar y Baltasar nunca llegaron. Ni por tierra, ni por mar, ni por aire. ¿Os gustaría averiguar qué pudo ocurrir para que los Reyes Magos no aparecieran? ¡Nunca lo adivinaríais!