Con más de un centenar de muestras, entre bocetos y creaciones publicadas e inéditas, ?Max: Panóptica, 1973-2011? abarca casi cuatro décadas de trayectoria de uno de los artistas visuales más representativos del panorama actual.El Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MuVIM) acoge una retrospectiva de su obra, que también recorrerá la red internacional del Instituto Cervantes.El libro de la muestra -dividido en cuatro etapas, una para cada decenio- reúne historietas, carteles, carátulas para producciones discográficas, trabajos para libros o colaboraciones en prensa.Se completa con fotografías que, desde su juventud, reflejan el recorrido profesional y vital de Max. En un artículo titulado Max en el tiempo, el escritor José Carlos Llop incide en la madurez artística del autor, su capacidad para haber fraguado un estilo propio cuando otros artista aún estaban forjando su incipiente identidad visual.Destaca de él su carácter observador, su universo visual ucrónico, con dibujos e historias alejadas del tiempo y al mismo tiempo inscritos en sus rastros; su apego por llevar a los lectores a un mundo antiguo -hadas, bosques, dioses, el postvictorianismo lovecraftiano, explica Llopmientras otros compañeros de generación ambientaban su obra en la modernidad. El reino de la infancia.