Su mamá es una bruja, su papá es un hada, y Mirabella tiene un poquito de los dos. Además... ¡a la prima mayor de Isadora le encanta meterse en líos!
Mirabella ha prometido no volver a meterse en líos. Pero, cuando invitan a sus nuevos vecinos, acaba castigada en su habitación. ¿Y si hace un hechizo para encogerse? ¡Así podrá jugar fuera sin que la vean!