RICHARDSON, DIANA / RICHARDSON, MICHAEL
El sexo tántrico alimenta el amor, aumenta la vitalidad y fomenta la salud mental. Por desgracia, actitudes muy generalizadas sobre la sexualidad masculina y el «buen sexo» se imponen a estas virtudes innatas, centrándose en la excitación de la eyaculación como meta única.Diana y Michael Richardson aplican los principios tántricos que llevan practicando más de veinticinco años y muestran a los hombres el camino para ir más allá de sus ideas preconcebidas y de la práctica sexual como un acto dirigido a un fin meramente mecánico (que suele provocar un estrés no deseado), para que puedan relajarse en el sexo como una unión meditativa de energías que se complementan.Explican cómo se puede incrementar el placer y prolongar los actos amorosos a base de contener el semen, y muestran los beneficios para la pareja mediante la penetración profunda y mantenida. También abordan la práctica de la penetración suave y cómo evitar la eyaculación precoz.En Sexo tántrico para hombres se presentan métodos contrastados para el juego amoroso previo, diagramas de secuencias de posturas sexuales, maneras de aumentar la sensibilidad sexual por medio de la conciencia y cómo alcanzar experiencias extáticas llevando al cuerpo de la mujer a un nivel sexual más intenso. Diana y Michael abordan asimismo la manera de emplear los órganos sexuales para sanar de manera física, emocional y espiritual tanto a hombres como a mujeres. «El libro de Diana y Michael Richardson Sexo tántrico para hombres es realmente excepcional.Basado en gran medida en los muchos años de experiencia de ambos autores en la dirección de retiros y seminarios para parejas (además de su dedicación a las enseñanzas de Osho sobre el neotantra y la sexualidad), este último libro es una exposición oportuna, sincera y, sobre todo, creativa.Resultará especialmente útil a los hombres que quieren comprender mejor los procesos por los que se puede elevar el sexo a la categoría de una actividad amorosa superior, y les enseña el camino que los conduce a un enfoque más atento, considerado y realizador de la práctica sexual.»NIK DOUGLAScoautor de Secretos sexuales, la alquimia del éxtasis