LUCAS MOLINA FRANCO - RAFAEL A. PERMUY
El 12 de diciembre de 1930, una parte de la guarnición militar de Jaca (Huesca), al mando de un capitán de Infantería rebelde y visionario,Fermín Galán, se sublevaba para intentar imponer la República por lafuerza de las armas. La intentona terminó mal, hubo varios muertos ymuchos heridos y el capitán Galán y su compañero Ángel GarcíaHernández serían fusilados en Huesca dos días después, tras un Consejo de Guerra sumarísimo.El día 15 del mismo mes dediciembre, tal y como tenía previsto el Comité Revolucionarionacional, un grupo de militares -la mayoría aviadores- al mando delgeneral Gonzalo Queipo de Llano y del comandante Ramón FrancoBahamonde, se hacían con la Base Aérea de Cuatro Vientos y desde allíproclamaban la República. Varios aviones tripulados por los alzados,despegaron para lanzar octavillas sobre la capital y bombardear elPalacio Real, aunque esto último no lo llegaron a realizar. Al igualque en Jaca, aunque sin víctimas, el golpe de estado fracasó rotunda e irremediablemente.Ambas sublevaciones fueron el preámbulo violento e imperativo de la República española, que llegar