Con un conocimiento de primera mano y una aguda lectura de sus enseñanzas, Mundy recupera la antiquísima y magistral enseñanza jainista sobre la relatividad, confirma la no-violencia como el único fundamento para una convivencia armoniosa, muestra el código profundo que es clave en la práctica de satipatthana y toma la antigua filosofía Samkhya como la más acertada estructura fundamental del cosmos.