Tras sus dos primeras publicaciones enmarcadas en el género negro, “La sonrisa del vencido” (La esfera de los libros) y “El sommelier de almas” (Editorial Círculo Rojo), Manuel Álvarez-Xagó presentó su nueva novela, “El camino imposible” (Roca Editorial), su primera incursión en otro tipo de publicaciones, con un emotivo canto de amor a la vida. Dos de sus pasiones, los animales y la naturaleza, juegan un papel importante en este trabajo, en el que el perro de una pareja de científicos españoles a los que el destino les golpea con dureza, es el gran protagonista. Y es que el can nos enseñará que todo camino es imposible hasta que alguien lo lleva a cabo.
- ¿Cómo surge la idea de hacer el libro y porqué ese cambio de género con respecto a los anteriores?
Soy de letras por estudios, pero soy una persona de curiosidad universal. Esta historia no fue premeditada, me vino a buscar. Junté una noticia que encontré en un diario extranjero, en la que hablaban de las investigaciones para detectar el cáncer a través del olfato de los perros, con mi pasión por los animales. Pensé que tenía que dar a conocer esto, meterlo en una historia que resulte interesante para que llegue al mayor número de gente posible.
- ¿Hubo mucho trabajo de documentación?
Esto que encontré por casualidad, investigando vi que hay mucha literatura científica. Tuve que leer mucho, en especial sobre temas médicos de los que no soy especialista. No fue sencillo, pero lo disfruté.
- El perro es el gran protagonista… ¿qué valores deberíamos de copiar de estos animales?
Sobre todo la lealtad, la conexión con sus instintos. Hace mucho que los seres humanos vivimos desconectados de nuestros instintos. Hay que tener esos valores primarios que están en la naturaleza y que el perro, que es el ser más cercano a nosotros, sigue siendo parte de esa vida salvaje.
- ¿Sería posible en la realidad que el perro encontrara a la niña?
Hay casos reales de accidentes en lo que esto llega a suceder. El año pasado, con el libro ya terminado, leí un caso que tuvo lugar en Colorado (Estados Unidos) en el que ocurre algo parecido y que me puso los pelos de punta. Hay casos, a lo mejor no tan extremos pero sí que es posible.
- En el libro también vemos que la vida puede cambiar en un instante, en una curva…
Dicen que la única constante en la vida es el cambio, pero no todo es cambio constante. Podemos vivir una vida plácida durante muchos años y, sin nosotros hacer nada, ponernos la vida patas arriba. Es un libro por el que pido perdón si en algún momento se hace sufrir al lector, pero que merece la pena.
- Un tema sensible como es la pelea de perros también aparece reflejado en el libro…
Es una lacra y hay mucho, desafortunadamente. No solo en España sino también en todo el mundo. Es un tema en el que se unen el afán por el dinero y la crueldad. El proceso de documentación sobre estos casos fue duro, como amante de los animales.
- El guiño a Asturias no podía faltar en “El camino imposible”…
En todos mis libros siempre intento hacer un guiño a la tierra. En este caso a la gente que se ve forzada a dejar Asturias en busca de un futuro mejor y brillar en su campo.
- ¿Tienes pensado escribir algún libro más? ¿Y de nuevo con un perro como gran protagonista?
Me encontré muy a gusto escribiendo esta última historia, porque es algo que me encanta. Si se da todo bien, posiblemente vuelva a escribir sobre esto.
