Gaspar Llamazares fue el encargado de abrir una nueva temporada de actividades en el espacio cultural de la librería La Pilarica, con la presentación del libro Sumar en tiempos de catástrofes (Orpheus Ediciones). En este nuevo trabajo, el ahora concejal en el Ayuntamiento de Oviedo habla acerca del marco político actual y ofrece algunas de las claves para que la izquierda logre un proyecto unificador y con proyección de gobierno. Porque como él apunta, “lo esencial en la política, como también en la vida, no es solo sumar sino fundamentalmente saber sumar”.
- Habla de catástrofes y calamidades, ¿por qué estamos sufriendo estos problemas?
Hay catástrofes naturales que hemos conocido en el pasado, pero por otro lado las catástrofes han cambiado de naturaleza y tienen mucho de calamidades. Es decir, tienen mucho de componente humano. En la época del Antropoceno una mayoría de las catástrofes tienen mucho que ver en cómo nos hemos organizado los seres humanos y como hemos menospreciado la naturaleza y a nuestros propios congéneres, y eso es lo que explica este encadenamiento de catástrofes que vivimos y esa reacción polarizada que tenemos entre el negacionismo y la respuesta tecnocrática. Ambas nos evitan profundizar en lo que importa, en qué nos hemos equivocado y en qué podemos mejorar para el futuro.
- La guerra de Ucrania, ¿volvemos a cometer los mismo errores del pasado?
Yo creo que el populismo ha contaminado también a la política internacional y ha convertido lo que hasta ahora era una debilidad de las organizaciones internacionales para solucionar mediante el derecho y de forma pacífica los conflictos en una impotencia, en una verdadera impotencia internacional donde lo que crece cada vez más es el poder duro, los que intentan ordenar el conflicto en función de sus intereses, no en función del derecho internacional. Naciones Unidas nunca tuvo una sensación mayor de debilidad, de impotencia. Ahí es donde crecen los conflictos, las guerras comerciales, las guerras militares…
- ¿Por qué el populismo tiene tanto poder en la actualidad?
Es una solución simple a un problema complejo. El populismo pega el puñetazo encima de la mesa, niega la realidad, o dice esto lo arreglo yo con un golpe de mano… tienen un nivel de audiencia que si en otros tiempos era del 20%, ahora es mucho más importante. La política tiene dificultades para explicar a los ciudadanos lo que pasa, y tiene más dificultades todavía para que haya una alternativa y una solución a esos problemas.
- ¿Qué le faltó a Sumar para dar el salto definitivo?
Yo creo que ha logrado algo muy importante que es eso, sumar en un periodo en el que pensábamos que íbamos a ir cada uno por nuestro lado, y haberlo hecho tan rápidamente es elogiable. Pero ahora hay que abordar el gran reto de hacer política en una situación de incertidumbre y el gran reto de organizar un nuevo modelo de partido. Si algo se demuestra en los últimos tiempos es que nuestra debilidad no es solo que haya medios de comunicación con una mayoría conservadora o medios que se dejen arrastras por el populismo o por intereses económicos, sino que hay una debilidad de las organizaciones políticas en la sociedad, hemos perdido las terminales que nos permiten conocer día a día y hora a hora lo que pasa en la sociedad y que nos permiten dar una explicación racional de lo que podemos y lo que no podemos hacer, eso es lo que le falta a la política.
- ¿Cómo ve el futuro? ¿Vendrán más catástrofes?
Estamos es una época de catástrofes. Durante un tiempo nos veremos obligados a combinar las medidas paliativas o de adaptación a esas nuevas situaciones con las medidas preventivas. Habrá un periodo de transición importante en el que nos crecerán los problemas políticos, que son especialmente favorables a la incertidumbre y a las soluciones fáciles, al populismo. Es mejor reconocer las dificultades, que estamos ante un momento de retos, y trabajar por organizar esas formaciones políticas democráticas frente al populismo y, por otra parte, dar soluciones concretas con una mayoría que no llamaría progresista sino pluralista, que sea capaz de defender los derechos conquistados y de lograr nuevos derechos.
- ¿Qué tal la experiencia como concejal en el Ayuntamiento de Oviedo?
Muy interesante, se la recomendaría a cualquiera que haya pasado por otra etapa política en el ámbito nacional o autonómico. Aquí ves la política en estado puro, es donde surgen los problemas y donde pueden surgir las soluciones concretas a la vida cotidiana. También yo creo que se puede contribuir en un sentido o en otro a la revitalización de la política. La mala política en el ámbito municipal puede deteriorar mucho la imagen de lo público, sin embargo la buena política, los buenos servicios, la buena democracia se nota más en el ámbito local, como en Mieres por ejemplo.