Fue un 26 de enero de 2022 cuando todo cambió. Ese día Alejandro Palomas dio a conocer al mundo durante una entrevista en la radio que fue víctima de abusos y agresiones sexuales continuadas por parte de un docente religioso del colegio La Salle de Premiá. A raíz de esta confesión pasó al primer plano de la actualidad, con infinidad de entrevistas en los medios de comunicación, llegando incluso a reunirse con el Presidente del Gobierno para tratar el problema de la pederastia en la Iglesia. En el libro “Esto no se dice” (Destino) relata cómo fueron aquellos hechos, el acoso escolar que sufrió durante varios años, cómo evolucionó como persona y cómo la escritura, la literatura y su madre le salvaron la vida.
- En el libro nos hablas de tu pasado, pero ¿cómo es el presente y el futuro de Alejandro Palomas?
No creo que haya mucha diferencia entre pasado, presente y futuro, básicamente porque se entremezclan mucho las cosas, el tiempo no es lineal. Muchas veces estás proyectándote en el futuro y a la vez eso te conecta con el pasado.
- ¿Qué consejo le darías a un niño que pueda estar pasando por lo que tu sufriste?
Que hablara, que hablara hasta que lo creyeran, hasta la afonía.
- ¿Cambió mucho la sociedad y la consciencia de la gente desde entonces?
Hemos mejorado, pero no creo que hayamos mejorado todo lo que deberíamos. El ritmo de mejora es muy pobre.
- ¿Qué se podría hacer para mejorar?
Cualquier cosa que se hiciera sería más de lo que se hace. Por un lado falta voluntad política, por parte de las instituciones, y por otra parte la gente evita hablar del tema. Yo confío mucho en que las mujeres son el motor de cambio de una sociedad, y si ellas no asumen ese protagonismo y ese rol para que esto cambie, esto no va a cambiar nunca. Tienen que dejar de tener miedo de enfrentarse a ello porque es algo que duele, tienen que dejar de temerlo y dar ellas el primer paso porque los hombres no lo van a dar.
- Estuviste en el foco mediático durante semanas, ¿qué se siente al ser el centro de atención de todo un país?
Sientes que estás en lo alto de una punta de actualidad, pero que esa punta de actualidad va a desaparecer como se funde una ola y termina el surfista en playa, y eso fue lo que pasó… Llegó la Guerra de Ucrania y desapareció el tema. Sientes como un súper subidón y de repente sientes que no hay nadie en la playa.
- ¿Qué hubiera sido de ti sin la literatura y la escritura?
Fue muy sanador, entendí que todos somos capaces de crear nuestra propia realidad, cada uno tiene las armas para crear realidades que se acomoden a sus necesidades, y eso nos salva la vida. A unos se la salva el deporte, a otros la cultura…. no tiene porque ser algo creativo, tiene que ser algo que te meta en un lugar en el que tú puedas moldear y modular la vida de acuerdo a tus necesidades.
- Las madres son un pilar fundamental para mucha gente, ¿qué sería de nosotros sin ellas?
Yo no habría sido nada, no habría llegado ni a los quince años sin mi madre.
- ¿Cuál es el libro más especial que escribiste?
“Una madre”. Es el más especial porque fue el libro que me dio a conocer, y porque cambió mucho mi trayectoria literaria y mi trayectoria vital, fue como una confluencia de muchas cosas. No es mi libro preferido pero sí el más especial.
- ¿Cuál es tu preferido?
“El tiempo que nos une”.
- Pero has dicho en alguna entrevista que el más fácil de escribir fue este último…
Sí, fue fácil porque es verdad, y trabajar con la verdad es muy fácil. No a todo el mundo le es sencillo trabajar con la verdad, yo soy un gran buscador de verdad.
- ¿Cuál es tu próximo proyecto literario?
Tengo varios. La semana que viene se estrena una obra de teatro mía, estamos con los ensayos. Estoy encantado porque es una obra que va a girar por toda España. Luego tengo un espectáculo propio, un monólogo, que se estrena en mayo. También estoy escribiendo una novela de adulto, tengo pendiente escribir la tercera parte de “Un hijo”…
- Hay Alejandro Palomas para rato…
También es algo que me planteo, ¿hasta cuándo? Uno parece que va a escribir para toda la vida y yo, cuando termino un libro, me planteo si quiero seguir escribiendo.
