Desde la oscuridad, la tristeza o el temor; pasando por la oportunidad, el ánimo, la ilusión o el deseo; hasta llegar a la luz, la euforia, el triunfo y la felicidad. Aránzazu Rodríguez hace un recorrido por las emociones en su nuevo libro, “De la oscuridad a la luz emocional”, un poemario que se convierte en una guía para todas aquellas personas que se encuentran en un mar emocional y no saben qué hacer con su vida. Coach, Trabajadora Social, Mediadora Familiar y Educadora Infantil, esta es su primera incursión en el mundo de la literatura y en el que también se incluye otra de sus pasiones, el arte, con la presencia de varias ilustraciones. Un libro que se podría definir como la poesía de las emociones.
En él encontramos hasta 55 poemas, desde la oscuridad hasta la luz emocional. “En la vida las emociones surgen en función de los acontecimientos, y luego cada uno las interpreta o las identifica a su manera. Oscuridad se refiere a emociones más negativas, pero no por ello son menos importantes. Hay que estar agradecido a las emociones, son las grandes amigas y aliadas”, apuntó. Este es un poemario diferente. “Hasta el momento no existía un poemario que trabajara el tema de las emociones, yo quería acercar la poesía a lo cotidiano”, explicó. “Somos emoción, para todo en la vida. En cada momento tenemos una emoción. Como cada uno de nosotros las gestionemos es la gran diferencia. El objetivo es que cada uno se conozca mejor”, dijo Aránzazu Rodríguez.
“En el proceso de crecimiento personal, el primer paso a tomar es ponerle nombre a la emoción”. Con el poemario se hace como una especie de catálogo de las emociones. “Al conocerte y saber dónde eres capaz de llevar tus límites, cuando tienes una situación adversa en tu vida aprendes a gestionarlo de otra manera, por lo tanto sufrirás menos”, señaló. El duelo y la pérdida también aparecen en el libro. “Aprendemos de todas las personas, nos nutrimos de ellas. Una de parte de ellas vive en nosotros”, reconoció. Pero para llegar a la luz hace falta la comprensión. “Cuando tu das razón a la emoción empiezas a identificarla y a conectar con ella. Cuando empiezas a gestionarla es el primer paso para subir, resolviendo todo lo demás”, explicó.
Una de las claves es que “la gratitud tiene que estar siempre”. Por ello el poemario empieza y termina dando las gracias. “Cuando llegas a un punto en la vida de una adecuada gestión emocional te das cuenta de la importancia de la gratitud. Todas las piedras, las personas que te encuentras en la vida… te están dando una lección de vida. Por ello es muy importante que, hoy en día, a los niños se les diga que no, porque si se lo ponemos todo fácil, cuando llega lo difícil aparecen las frustraciones”, explicó la autora.
A raíz de estas frustraciones o preocupaciones surgen los primeros poemas de nuestra protagonista. “Siempre escribí poesía, desde muy pequeña. Tras unos años empecé a conservar los poemas que escribía, los organicé y les di forma para hacer todo ese proceso de crecimiento”, apuntó Aránzazu Rodríguez, que defiende que “hay que trabajar la emoción. Hay que gestionar a tiempo para que todo sea más sencillo”.
