Un día aburrido como tantos otros, Alicia se duerme y de este modo entra en el País de las Maravillas de la mano del Conejo Blanco. Allí conocerá a la Falsa Tortuga, la Reina de Corazones, el Gato de Cheshire, la Duquesa, el Sombrerero Loco o la Liebre de Marzo, entre otros muchos personajes fantásticos con los que vivirá aventuras de lo más variopintas. Las expresivas ilustraciones de Chris Riddell resaltan el humor absurdo y fantástico de este texto imperecedero.