Inteligente, curiosa y atenta a todo lo que sucedía a su alrededor, Janet Riesenfeld se convirtió en testigo excepcional de la vida en Madrid durante los tres primeros meses de la guerra civil española y en protagonista de una historia de amor desgarradora.
De regreso a Estados Unidos decidió escribir sobre su experiencia tanto como un ejercicio de compromiso político como para llamar la atención sobre el drama que se estaba viviendo en España.
El resultado fue Bailarina en Madrid (Dancer in Madrid, 1938), un texto ágil y emotivo con el estilo propio de una novela o de un guion para cine con diálogos.
En esta edición, los textos de Julián Casanova, Agustín Sánchez Vidal y Amparo Martínez Herranz ayudan a entender el Madrid en el que vivió Janet, el ambiente artístico en el que se formó y trabajó como bailarina de danza española, y la trayectoria vital y profesional de una mujer capaz de reinventarse y de crecerse ante las dificultades.
Tras la escritura de este libro, Janet se encontró casi sin quererlo con una fructífera carrera como escritora.
Ya establecida en México, donde triunfó como actriz, pasó a ganarse la vida tramando guiones cinematográficos.
Fue entonces cuando transformó su propia historia, junto a la de otros muchos, entre ellos su marido, Luis Alcoriza, que también abandonó la interpretación para convertirse en guionista y director de cine.
O la de su amigo Luis Buñuel, con el que colaboró como escritora de películas, convirtiéndose en parte de su familia en el exilio.
También marcó la vida de un joven Gabriel García Márquez, al que ayudó moral y materialmente cuando éste comenzaba a abrirse camino (y se planteaba una nueva novela, Cien años de soledad).
El germen de todos estos cambios se adivina en Bailarina en Madrid.
Una obra escrita con la honestidad y la pasión de la que Janet Riesenfeld hizo gala a lo largo de toda su vida.