Ines de la Fressange y Marin Montagut abren las puertas de quince estilosas casas de París (incluidas las suyas) para mostrarnos las interioridades y la sensibilidad del encanto parisién.
Son quince hogares de estilos decorativos muy diferentes que, sin embargo, tienen en común tanto su elegancia como que comunican la personalidad y las aficiones de sus habitantes. No son solo casas decoradas, sino casas habitadas que, además, tienen vida propia. Los secretos de este nuevo estilo, que podríamos llamar chic ecléctico, son la mezcla armoniosa y atrevida de estilos nuevos y antiguos, la reinterpretación de la función de los elementos y la convivencia de detalles, objetos y muebles singulares y dispares. Los elementos que conforman cada ambiente pueden ser recuerdos de viajes, objetos de segunda mano, herencias familiares, obras de artesanos, piezas recogidas en la calle o hallazgos del desván familiar. Estas quince casas carismáticas nos revelan que todo lo que nos gusta puede convivir y que los hogares son capaces de cambiar y evolucionar a medida que lo hacen sus moradores.
Todo es posible y todo encuentra su lugar: una regadera transformada en jarrón, cestos, antiguos garrafones de vidrio, flores frescas, lámparas colgantes hechas con tarros de cristal, collages, frascos farmacéuticos de colores intensos, obras de arte, un mueble vintage de cajoncitos restaurado para que siga pareciendo viejo.