Nuestro planeta muestra un claro deterioro ambiental: cambio climático, crisis energética, agotamiento del modelo de consumo...
Uno de los primeros pasos que debemos dar para revertir esta situación es reconocer y evitar las ecomentiras o ecomitos: las falsas creencias medioambientales que están instaladas en el imaginario popular como la efectividad de las cuotas en las emisiones de CO2, la exaltación de fuentes de energía alternativas que quizá no son todo lo beneficiosas que parecen o un amplio abanico de medidas que tiene más sustento político que científico.