El tema amoroso lleva aparejado irremediablemente el del honor, de extraordinario rendimiento dramático. Los protagonistas de la comedia suelen ser caballeros esforzados y virtuosos que merecen la admiración de sus compañeros, amigos, sirvientes... Reúnen diversas virtudes, tales como la valentía, la entereza, la lealtad, la honestidad, un comportamiento ejemplarmente cristiano. (...)Lope de Vega encarna una figura típicamente española de su tiempo: su vida, apurada con pasión, se debate entre sus creencias cristianas y una conducta a veces disoluta; los contrastes barrocos se plasman en su azarosa biografía.